Mención en Concurso de Ideas
Una (dos) manzana.
Un (dos) volumen claro y reconocible un poco ajeno a la volumetría sugerida por el plan.
Una topografía que se entiende como molde y que no se excava demasiado.
Un zócalo que asume la topografía compleja del lugar.
Una vibración en las fachadas, todas distintas, todas iguales.
Unas viviendas flexibles para vidas aún por hacer y en donde todas las estancias vivideras dan a la calle.
Una concentración de funciones en bandas claras.
Un patio interior lleno de aire fresco.
Un lenguaje atemporal para durar en el tiempo.
Una construcción para que casi no haya mantenimiento.
Una sostenibilidad que no se ve pero que existe intrínsecamente en el planteamiento arquitectónico.
Al final 30 viviendas en la parcela A y 24 en la parcela B dan un buen balance entre aprovechamiento y calidad espacial.
Ficha técnica